jueves, 6 de noviembre de 2008


Soy náufraga de otro siglo
Desterrada en una isla extraña
Construí una casa de ilusiones
En un mundo de cemento
Pronuncié un sermón en el desierto
Recogí mi voz hastiada como eco
Hoy al despertar sentí a mi lado
La caricia de un sueño olvidado
Navego a ciegas en dos aguas
La del corazón que no se rinde
La del desencanto que me hunde
De pronto mi sonrisa es el sol
De pronto mi piel se desgaja
Ahora soy ligera y el viento
Me acompaña en mi danza de vida
Ayer me derretí cual Icaro en llamas
Hoy me alzo puño en alto
Contra todos mis fantasmas

No hay comentarios: